Domingo 6 de Octubre.
9.00 de la mañana, no sé que ponerme. No quiero pasarme de ropa y pasar calor, o quedarme corto y pasar frio, menudo dilema, y eso que lo podría solucionar llevando en la mochila ropa de más para prevenir esta situación, pero no me gusta la mochila, me resulta algo incomoda.
Me la juego y me pongo una térmica con el culote largo y la chaqueta, guantes de windstopper y las Celsius, y me largo que llego tarde.
David, Remi y gasofa están puntuales en nuestra cita, junto con los ketekes , asique hoy no esperamos a nadie más y nos vamos a por el resto .
En un descuido los ketekes se van por otro sitio, no deben de querer venir con nosotros cosa que tampoco me extraña demasiado, pero nos encontramos con los sherpas, sin Domingo, que no quiere ser su amigo, que le habrán hecho estos sherpas, si es que están locos. Estos también se van por otro sitio.
Hoy llegamos antes de la hora al submarino y somos nosotros a los que nos toca esperar, pero en breve aparecen Paco, Alvaro, Rodri con bici prestada y Toñin.
La mañana fría y húmeda nos quita las ganas de hacer exploración y optamos por algo sencillo y típico de las rutas de invierno, y lo dicho, a pisar nieve.
Pocos ciclistas se ven hoy por la sierra de “SEGOVIA”, pero para sorpresa nuestra nos encontramos con unos tipos en motos de enduro con los cuales tenemos, o tienen, porque yo esperando a Toñin llegue un poco después, un enfrentamiento verbal por quien puede transitar por la montaña, y según sus afirmaciones, somos nosotros los que no podemos estar allí. El tipo que afirma tal estupidez nos quiere convencer que es el dueño de la zona (Pradera De La Fuenfria ,Camorca), que tiene 300 vacas y que estamos allí porque él quiere, y todo eso con una prepotencia fuera de lo normal ,vamos que si da con alguno de fuera hasta se lo cree. A este le va el dicho ese de que más vale estar callado y parecer tonto que hablar y demostrarlo. Menos mal que unos tenemos más educación y solo quedo la cosa en palabras.
Comentando la jugada seguimos nuestro paseo por la zona prohibida (no sabemos para quien), y empieza a haber nieve de esa que no te deja casi avanzar, pero nosotros que somos unos machotes adelante, que a eso hemos venido.
La temperatura en la zona más alta desciende hasta rozar los cero grados y las manos se quedan un poco frías, por lo que hoy perdonamos el momento orejón. Descendemos rápido, pues el terreno donde ya no hay nieve, gracias a las lluvias de estos días, está húmedo y tenemos mayor agarre y te permite ir más deprisa, eso sí, cuidado con las piedras y los palos que resbalan.
Llegamos a la zona del rio y ya no se ve esa multitud de gente que en fines de semana pasados, es lo bueno de este tiempo, no se masifica la sierra y se puede disfrutar del entorno sin que tengas que andar esquivando gente despistada que no saben ni donde están, bueno alguno queda.
Volvemos a casa contentos. Hemos hecho una buena ruta de esas típicas de invierno, pero con apenas descansos, con nieve, sin pasar mucho frio, y con muy buena compañía que es lo más importante.